ARTÍCULO | Angel E. Rojas Kingland, Ing., Ingeniero de mantenimiento en Saudi Aramco

En tiempos recientes, la gestión del mantenimiento ha evolucionado más allá de un proceso de negocio y se ha enfocado más en la creación de una cultura de trabajo, donde los valores son la proactividad, eficiencia, consistencia, precisión e innovación en la ejecución de las tareas de mantenimiento. Esta cultura de trabajo se crea a través del desarrollo de las competencias del personal de mantenimiento, estandarización de los procesos de mantenimiento, aplicación de nuevas tecnologías en las áreas de predicción de fallas, optimización de los tiempos de reparación y el uso de los datos para la toma de decisiones.

Una gestión del mantenimiento efectiva será aquella que logre agregar valor al negocio de manera sostenible en el tiempo sin importar quien ejecute los trabajos. Para lograrlo las organizaciones de mantenimiento deben garantizar que:

1. El personal de mantenimiento y confiabilidad tienen a su alcance los entrenamientos requeridos para desarrollar sus competencias y poder realizar sus funciones de forma rápida y sin errores.

2. El personal técnico tiene acceso a herramientas y equipos en buenas condiciones y aptos para el servicio.

3. Hay procesos y procedimiento de trabajos definidos, probados y fáciles de seguir.

4. Toda la información técnica de los activos, incluyendo historial de fallas, órdenes de trabajos, manuales, etc., están disponible sin restricciones.

5. Prácticas establecidas para la captura de la condición del activo antes y después de las actividades de mantenimiento (as-found as-left).

6. Prácticas establecidas enfocadas en el reporte, análisis y eliminación de fallas (FRACAS).

7. Los materiales y repuestos usados en las labores de mantenimiento son de alta calidad, fáciles de ubicar y son almacenados en condiciones óptimas que garanticen su confiabilidad.

8. Los procesos de mantenimiento son auditados de manera regular en búsqueda continua de oportunidades de mejora.

9. Medidores e indicadores de gestión son establecidos basados en indicadores modelos reconocidos por la industria, que faciliten y promuevan la práctica de benchmarking.

10. Acceso a una plataforma integrada de gestión del mantenimiento asistido por ordenador (GMAO), que soporte todas las funciones del mantenimiento, evalué la salud de los activos y empodere al personal de mantenimiento y confiabilidad en las tomas de decisiones y búsqueda continua de mejoras.

¿Cuáles son los elementos clave de la gestión del trabajo de mantenimiento?

Figura 1. Elementos clave en gestión del trabajo de mantenimiento.

1. Identificación, selección y priorización.

Los trabajos de mantenimiento deben ser validados, clasificados y priorizados de forma efectiva empleando métodos específicos basados en riesgo y alineados al negocio. La finalidad es gestionar eventos fortuitos o planificados por igual, tales como: emergencias, mantenimiento preventivo, monitoreo de condición, pruebas funcionales e inspecciones o mantenimiento correctivos.

El objetivo es gestionar de manera efectiva los recursos disponibles, asegurando que los eventos de mayor magnitud sean corregidos de manera expedita, sin comprometer significativamente la ejecución de los trabajos mantenimiento proactivo que sostienen o involucran mejoras a la seguridad y confiabilidad de los sistemas y equipos.

2. Planificación y programación.

Con el fin de garantizar que los trabajos de mantenimiento se ejecuten de manera segura y eficiente, es vital para el negocio que la información del trabajo sea detallada (alcance de trabajo, procedimientos, especificaciones, y recursos requeridos) y comunicada al personal de ejecución antes del comienzo del mismo.

Al mismo tiempo se deben asegurar los permisos, autorizaciones y disponibilidad de los recursos humanos, herramientas, materiales y servicios requeridos en un tiempo específico. Con ello se busca maximizar la eficiencia y efectividad de las actividades de mantenimiento, así como minimizar el impacto en la producción. Para ello, se deben considerar las necesidades de producción en la escala temporal y el coste de oportunidad para el negocio durante la ejecución de las tareas.

3. Ejecución y aseguramiento de la calidad.

El GMAO (Gestión del Mantenimiento Asistido por Ordenador) permite una mejor planificación, programación y gestión de la información de los activos. Sin embargo, su incidencia en la ejecución y calidad del trabajo de mantenimiento es limitada, ya que esta depende en gran medida de la cultura de trabajo de los mantenedores y operadores.

La mejora en la confiabilidad de los activos empieza por alinear los valores en la gestión de mantenimiento y confiabilidad de la fuerza laboral. Es necesario que los mantenedores y operadores crean en los programas de mantenimiento y confiabilidad, y a su vez se encuentren alineados a los objetivos del negocio. Ese cambio cultural por lo general demora años en lograse, pero los beneficios valen la espera, ya que desempeña un papel clave en la mejora de la salud de los activos, en el aumento de la productividad y la rentabilidad del negocio.

La creación de una cultura de trabajo alineada a los objetivos del negocio traerá como resultado final un ambiente de trabajo más saludable, más seguro y más productivo. Para ello, se debe contar con programas de capacitación en tareas, prácticas y tecnologías requeridas para una ejecución eficiente, precisa y rápida de los trabajos, combinado con un programa de evaluaciones periódicas de la calidad de los trabajos, con un enfoque abierto que asegure que los estándares acordados se cumplan y al mismo tiempo permita cambios que hagan que los estándares sean alcanzables.

4. Cierre y documentación.

Con el rápido avance de la 4IR (Fourth Industrial Revolution), la documentación detallada y precisa del trabajo de mantenimiento es esencial para el buen monitoreo de la gestión de mantenimiento, análisis de falla, toma de decisiones e identificación de mejoras.

Por lo tanto, las organizaciones de mantenimiento deben centrar su enfoque en establecer prácticas que garanticen la captura de datos fiables sobre la condición del equipo antes y después del trabajo. En este aspecto se incluyen: componentes fallidos y remplazados, acciones correctivas tomadas, recursos utilizados (competencias, herramientas, materiales, etc.), desviaciones o retrasos en el plan de trabajo, costos actuales directos e indirectos, etc.

El diseño de los formatos de captura de datos debe ser estándar, sencillo y enfocado a los mantenedores y operadores de los activos. Actualmente, hay plataformas y dispositivos móviles que facilitan la colección y consulta de datos en campo, eliminado el papeleo innecesario y optimizando la gestión de cierre y confirmación de los trabajos ejecutados de forma considerable.

5. Medidas y control del desempeño.

Las medidas y el control del desempeño están encaminados a definir indicadores de gestión que permitan monitorear el cumplimento de los procesos establecidos, y a hacer seguimiento de las metas del negocio (seguridad industrial, productividad, confiabilidad y rentabilidad). La finalidad es evaluar su evolución a lo largo del tiempo, identificar y corregir desviaciones a través de tomas de decisiones oportunas y definir estrategias acertadas de mejora continua.

Con la digitalización de los procesos de gestión de mantenimiento y el uso de sistemas y dispositivos IIoT, los tableros de control han evolucionado para ofrecer indicadores de gestión en tiempo real, con representaciones gráficas versátiles que brindan acceso rápido a información del negocio relevante. Esto ha derivado en una mejor comprensión de la gestión de mantenimiento y al fomento de la toma de decisiones ágiles y oportunas.

Referencias:

1. Hjartarson, T.; Jesus, B.; Hughes, D.T.; Godfrey, R.M. Development of Health Indices for Asset Condition Assessment. In Proceedings of the Proceedings of the IEEE Power Engineering Society Transmission and Distribution Conference, Dallas, TX, USA, 7–12 September 2003.

2. Hughes, D.T. The use of health indices to determine end of life and estimate remnant life for distribution assets. In Proceedings of the 17th International Conference on Electricity Distribution, Barcelona, Spain, 12–15 May 2003.

AUTOR:

ÁNGEL E. ROJAS KINGLAND, Ing.

Ingeniero de Mantenimiento en Saudi Aramco, asegurando la implementación y sostenibilidad
de los programas corporativos de mantenimiento
y confiabilidad, enfocados en la Excelencia
Operacional y la rentabilidad del negocio.